El primer paso que debe dar cualquier inversor que quiera operar con acciones o títulos públicos en la Argentina es acercarse a una Agencia o una sociedad de Bolsa para abrir una cuenta.
Tras establecer este vínculo, el bróker abrirá una cuenta llamada “comitente” en la Caja de Valores a nombre del inversor, donde se va a depositar la renta de los bonos y el capital invertido así como también registrar los movimientos de compra y venta de títulos valores.
Y si bien puede parecer un trámite engorroso para quienes no están avezados en el tema, resulta ser un paso meramente burocrático.
Tras establecer este vínculo, el bróker abrirá una cuenta llamada “comitente” en la Caja de Valores a nombre del inversor, donde se va a depositar la renta de los bonos y el capital invertido así como también registrar los movimientos de compra y venta de títulos valores.
Y si bien puede parecer un trámite engorroso para quienes no están avezados en el tema, resulta ser un paso meramente burocrático.
“Simplemente para abrir una cuenta comitente se debe acercar
la persona a una Agencia o Sociedad Bursátil con documentación que avale
su identidad y el origen de los ingresos que desea invertir”, explicó Franco Brizzo de Orlando Bursátil S.A.
Cuáles son los requisitos
Para abrir una cuenta en una sociedad de Bolsa, el inversor debe reunir una serie de documentos legales e impositivos.
“Entre los documentos a presentar se encuentran el DNI, constancia de CUIT o CUIL, declaraciones de ganancias y bienes personales si correspondiera, últimos recibos de sueldo o constancias de monotributo, mínimamente y por cada titular que se desea agregar a la cuenta comitente”, señaló Brizzo.
En este sentido, Santiago Bugarin, director de Gio Bursátil, explicó que el inversor debe presentar todos "los justificativos económicos que demuestren que las operaciones a realizar condicen con su capacidad económica y que los fondos provenientes o que surjan de las operaciones provienen de su actividad lícita".
Además, el inversor debe presentar una factura de un servicio a su nombre para verificar su domicilio en la Argentina. Una vez reunida esta documentación, se procede a llenar una serie de formularios con el broker para concretar la apertura de cuenta.
“Se le hará completar una ficha en donde se solicitan datos personales, firmar declaraciones juradas y tomar conocimiento sobre las operaciones que se pueden realizar”, dijo Brizzo y agregó que una vez completado ese “simple proceso”, se estaría en condiciones de comenzar a invertir.
Vale aclarar que el trámite puede realizarse personalmente o puede enviarse por correo postal, enviando la documentación requerida con firma certificada.
Cuáles son los costos
Aunque muchas sociedades de Bolsa no cobran gastos de apertura, existen una serie de costos fijos relacionados al mantenimiento de la cuenta y a los depósitos y los retiros que se realicen.
También hay gastos de comisiones que son variables, porque dependen de la cantidad y del monto de las operaciones realizadas. En algunos casos, si el monto es muy grande, algunas sociedades de Bolsa pueden cobrar una comisión menor.
En promedio, el rango que se cobra tanto para vender como para comprar se ubica entre el 0,5% al 1,5% del monto de la operación.
Por último, el monto mínimo para comenzar a operar depende del instrumento financiero en que se desee invertir y del broker a través del cual se opere.
Cuáles son los requisitos
Para abrir una cuenta en una sociedad de Bolsa, el inversor debe reunir una serie de documentos legales e impositivos.
“Entre los documentos a presentar se encuentran el DNI, constancia de CUIT o CUIL, declaraciones de ganancias y bienes personales si correspondiera, últimos recibos de sueldo o constancias de monotributo, mínimamente y por cada titular que se desea agregar a la cuenta comitente”, señaló Brizzo.
En este sentido, Santiago Bugarin, director de Gio Bursátil, explicó que el inversor debe presentar todos "los justificativos económicos que demuestren que las operaciones a realizar condicen con su capacidad económica y que los fondos provenientes o que surjan de las operaciones provienen de su actividad lícita".
Además, el inversor debe presentar una factura de un servicio a su nombre para verificar su domicilio en la Argentina. Una vez reunida esta documentación, se procede a llenar una serie de formularios con el broker para concretar la apertura de cuenta.
“Se le hará completar una ficha en donde se solicitan datos personales, firmar declaraciones juradas y tomar conocimiento sobre las operaciones que se pueden realizar”, dijo Brizzo y agregó que una vez completado ese “simple proceso”, se estaría en condiciones de comenzar a invertir.
Vale aclarar que el trámite puede realizarse personalmente o puede enviarse por correo postal, enviando la documentación requerida con firma certificada.
Cuáles son los costos
Aunque muchas sociedades de Bolsa no cobran gastos de apertura, existen una serie de costos fijos relacionados al mantenimiento de la cuenta y a los depósitos y los retiros que se realicen.
También hay gastos de comisiones que son variables, porque dependen de la cantidad y del monto de las operaciones realizadas. En algunos casos, si el monto es muy grande, algunas sociedades de Bolsa pueden cobrar una comisión menor.
En promedio, el rango que se cobra tanto para vender como para comprar se ubica entre el 0,5% al 1,5% del monto de la operación.
Por último, el monto mínimo para comenzar a operar depende del instrumento financiero en que se desee invertir y del broker a través del cual se opere.
Algunas sociedades de Bolsa cuentan con montos mínimos muy elevados
para invertir, pero el inversor minorista puede optar por otras
alternativas donde el monto es más bajo. Asimismo, algunos instrumentos
financieros ofrecen la posibilidad de empezar con una suma de $ 1.000.
Autor: De Sousa Quintas
Autor: De Sousa Quintas
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